Qué onda raza topiquera.
Si la obesidad infantil fuera una
carrera, México iría en el primer lugar (Forbes 2017), es más yo creo que hasta
ganamos por default durante un par de años, muy tranquilamente. Triste pero
cierto y a raíz de este gran problema, nos preguntamos ¿qué se está haciendo en
las escuelas para combatir la mala alimentación?
El día de hoy vamos a hacer una
pequeña investigación, respecto a la alimentación de los niños y niñas dentro
de las escuelas.
Crear hábitos de alimentación
saludable va de la mano con actividades en clase, tareas y libros de texto, pero
eso va más con el quehacer docente y no deseo señalar lo que debe hacer.
Tampoco voy a resaltar, como los
padres de familia deben ayudar a los niños a desarrollar su capacidad de selección
de alimentos saludables antes que la comida chatarra y practicar ejercicio;
porque prefiero centrarme en algo que puedo tener mayor intervención.
Esto es:
¿qué pasa con las cooperativas dentro de las escuelas?
Las cooperativas son las
“tienditas” dentro de las escuelas, y es el lugar donde los estudiantes compran
su “lunch” durante el recreo, para regresar al salón cuando suene la campana.
Por ello forman parte del
ambiente escolar, el cual influye directamente en la formación de hábitos en
los niños.
Y si la mayoría de los alimentos
disponibles son chatarra, entonces, ¿no se está “amaestrando” a los niños a una
dieta rica en grasa, harinas refinadas y azúcares?, ¿fomentando hábitos de vida
a favor de empresas productoras de alimentos y bebidas industrializadas, aunque
sea indirectamente?
Interesante es que desde el
2010-2011, México creo un acuerdo de salud a nivel nacional que combate al
sobrepeso y la obesidad, el cual obliga a cada escuela a ofrecer alimentos
saludables a la población infantil para una mejor alimentación.
*Como nota adicional en el 2014 se
aumentó el precio de los refrescos, con la excusa de disminuir la obesidad;
pero al 2017 en México, su impacto a ha sido nulo.
Y si bien es una excelente
iniciativa, alguien puede decirme ¿cómo vamos?
Lamentablemente, para nada bien.
Entrevistando a docentes de
algunas escuelas, nos dicen que nunca han visto que alguna autoridad revise lo
que se vende en las cooperativas e incluso contaban como cuando en un principio
se llegó a implementar, los niños no compraban la fruta o los alimentos
saludables y eran pérdidas económicas para la cooperativa.
Ese hecho ocasiona que la renta
que pagan las cooperativas a la escuela por el espacio, sea más difícil de juntar;
y por lo tanto prefieren vender comida chatarra que comida nutritiva, la cual
genera adicción a los niños por los productos altamente endulzados y así
sucesivamente.
De tal forma que añadimos otra estrategia fallida a la lista 😢.
¿Tenemos herramientas legales para
exigir (padres de familia o ciudadanos) que se disminuya la venta de comida
chatarra y bebidas calóricas?
Sí
¿Se necesita urgentemente cambiar
las cosas para mejorar la salud de los niños en México?
Sí
¿Por qué no se hacen las cosas?
No lo sé, yo no tengo hijos, pero
eso no es excusa para decir que no me importa y pasarle la bolita a otra
persona; lo que sí es definitivo es que alguien no está cumpliendo con darle
seguimiento a esta obligación de las escuelas y nuestra indiferencia impacta en
la salud de las futuras generaciones.
Espero que este escrito despierte
la preocupación sobre la alimentación en las escuelas y nos ayude a proponer
cambios que mejoren la salud de niños y niñas en México.
Eso es todo por hoy raza
topiquera, le dejare las referencias para que puedan profundizar más en este
tema, si así lo desean.
Recuerden compartir el vídeo si
les gusto y dejarnos su opinión en la parte de los comentarios.
Muchas gracias en especial a
quienes ayudaron a contarme sobre esta problemática en las escuelas donde
trabajan o como la abordan con sus hijos.
Me despido, yo soy Pablo Cocas,
Bye Bye.
Fuentes:
2010.
Acuerdo nacional para la salud alimentaria, estrategia contra el sobrepeso y la
obesidad». Secretaría de Educación Pública y Secretaría de Salud. México.
Forbes México, consultado el 15 de septiembre
2017 en: https://www.forbes.com.mx/impuesto-a-refrescos-con-impacto-nulo-en-mexico-anprac/
2017. Cárdenas-Villalvazo, A., Lupita Barreto,
A., Martínez Moreno, G., Aguilera Cervantes, V. G., Acosta Aguilar, P., Ortiz-Gómez,
L., & López-Espinoza, A. Hábitos de alimentación en el hogar y la escuela
como factores de obesidad infantil en Cd. Guzmán, Jalisco. Revista
Mexicana de Investigación en Psicología, 4(S1), 59-70.
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